Si eres capaz de combinar el copywriting con la psicología del consumidor le darás un golpe directo al mentón de la indiferencia.
El 95% de las decisiones de compra se toman en el subconsciente.
El copywriting efectivo es el que está detrás del cliente que dice “no puedo vivir sin esto” cuando hacía 5 minutos no sabia que existía.
El Subconsciente: Ese Gigante Dormido
El subconsciente es ese gigante dormido que, sin que tus clientes lo sepan, toma las riendas de sus decisiones.
El copywriting que entiende y despierta a este gigante es el que gana su atención.
Hablamos de palabras que se cuelan en la mente como un mantra, que se repiten en la ducha, en el coche, en la cola del supermercado.
Tip: Usa palabras que activen imágenes mentales poderosas. Por ejemplo, en lugar de "zapatos cómodos", puedes decir "cómo caminar sobre nubes”.
El Deseo: La Llama que Todo lo Consume
El deseo es esa llama que arde en el pecho de tus clientes y el copywriting es el atizador que la aviva.
Nadie crea necesidades, en el mejor de los casos puedes revelar deseos ocultos y mostrarles que lo que ofreces es la pieza que falta en el rompecabezas de su felicidad.
Truco: Apela a descripciones sensoriales en tu copy. Describe no sólo cómo se ve el producto, sino cómo se siente, suena o incluso huele.
La Confianza: El Puente sobre el Abismo (de la Duda)
La confianza es el puente que tus clientes deben cruzar para llegar a la acción de compra.
Ese puente lo construyes con copy genuino, con testimonios reales, con garantías que no son letra pequeña sino compromisos de hierro.
Tip: Incluye detalles específicos que hablen de beneficios concretos que dibujen una imagen nítida en la mente del lector y no pinceladas sobre generalidades.
La Urgencia: El Reloj que Tictaquea
La urgencia no es presión, es oportunidad. Es el tic-tac de un reloj que les recuerda que el tiempo se acaba.
Nunca nada es para siempre y la oferta que tienen delante es un cometa que no volverán a ver pasar.
El copywriting crea esa urgencia no con amenazas, sino con invitaciones a no perderse la fiesta. (FOMO)
Consejo: Si tu oferta acaba hoy, se acaba hoy. No mandes un correo al día siguiente ampliando el plazo tratando de pescar alguna venta o tu credibilidad caerá en picado. El precio que pagarás es demasiado alto.
La Exclusividad: El Club al que Todos Quieren Pertenecer
Groucho Marx nos dejó una frase épica:
“Nunca pertenecería a un club en el que me admitieran como socio”
Eso sí que es exclusividad.
La exclusividad es ese club VIP al que todos quieren pertenecer.
El copywriting es el portero que les ofrece la entrada.
Se trata de hacerles sentir que lo que compran no es un producto más, es una experiencia única, algo reservado para unos pocos.
Tip: Usa la personalización para hacer que cada cliente se sienta como si la oferta estuviera hecha sólo para él.
El Copywriting como Maestro de Ceremonias
El copywriting no es el histérico del megáfono en una protesta.
Es el maestro de ceremonias que entiende la psicología del consumidor y la utiliza para guiar a la audiencia a través de una experiencia de compra de la que se disfruta tanto el viaje como el destino.
Es la diferencia entre un cliente que compra una vez y un cliente que se convierte en fan.
Truco: Termina con una pregunta retórica que ataque el deseo o la necesidad del cliente, invitándolos a imaginar cómo mejorará su vida después de disfrutar de tu producto o servicio.